Tiempo de festejar y celebrar: “Sesenta años educando con amor”

Este es el lema que durante todo el año acompaña al colegio Santa Teresita. Quizás se pregunten qué significa, con gusto lo explicaremos…

Durante todo el 2016, nuestra querida escuela celebra 60 años de vida; 60 años de servicio educativo basados en el amor. Todo comenzó en 1956, en la localidad de San José, provincia de Mendoza, de la mano de las hermanas misioneras de la Consolata las cuales, siguiendo el mandato del beato padre José Allamano, de ir más allá de las fronteras anunciando la Gloria de Dios, se dieron cuenta de la necesidad de muchas madres de familia que debían trabajar en las plantaciones agrícolas que por esa época rodeaban la zona, como así también en otros oficios, y no tenían con quién dejar a sus pequeños hijos. Atentas a esta situación las hermanas reciben a los niños para así poder ayudar a las madres, y de esta forma dan inicio a un humilde jardín de infantes, en donde no solo se atendería el cuidado de los pequeños, sino también su desarrollo físico, intelectual y espiritual, además de acompañar a las familias que confiaban a ellas su mas preciado tesoro: sus hijos. Fue así como ese servicio amoroso desde el jardín de infantes, que primero funcionó en las instalaciones de la parroquia Nuestra Señora de la Consolata, a escasos metros de donde hoy se encuentra la institución, fue convirtiéndose en lo que hoy es, la comunidad del colegio Santa Teresita. Y a medida que este sueño de amor iba creciendo un nombre se le debía dar y que mejor que el de Santa Teresita. Ella, patrona de las misiones y cuya misión fue y será ser el amor dentro de la Iglesia, era la indicada para acompañar y cuidar con su lluvia de gracias cada instante de vida de esta familia educativa misionera.

fiesta-cena de la familia docente

Y porque celebrar 60 años no son poca cosa, esta familia educativa dispuso de diferentes momentos, durante el mes de octubre, para que el clima de fiesta no termine:

· CELEBRACIÓN EN EL DÍA DE SANTA TERESITA DEL NIÑO JESÚS: el 1 de octubre se dio inicio a los festejos con una fiesta , la de nuestra querida protectora Santa Teresita del Niño Jesús. Toda la escuela se vistió de fiesta y en una procesión los alumnos del nivel primario, secundario, personal docente y no docente, padres, en fin todos aquellos que conforman la comunidad educativa, acompañaron en procesión la imagen de Santa Teresita, quien recorrió la plaza cercana a la escuela para luego acompañar lo que sería la celebración eucarística. Celebración por medio de la cual se dio gracia al Señor por el don de estos años en donde con mucho esfuerzo, entrega y amor se ha ido construyendo un sólido camino educativo junto a todos aquellos que han pasado por las aulas del colegio. Muchos eran los motivos para dar gracias, y el principal el poder estar juntos, reconociendo que la labor de tantos años se debe l sustento de nuestro Señor Jesucristo, que a ejemplo del beato padre José Allamano, encuentra en la Sagrada Eucaristía la base y el fundamento por el cual la escuela cumple su misión diariamente.

· CELEBRACIÓN DE LA FIESTA-CENA DE LA FAMILIA: El día sábado 22 de octubre, se realizó la “Fiesta de la Familia”, fiesta que ya se ha convertido en una hermosa costumbre dentro de la comunidad cuyo objetivo es el poder compartir y fortalecer aún más sus lazos como la gran familia que somos en un clima de alegría y distensión. Sin embargo esta fiesta tenía un condimento especial, los 60 años del colegio. Por este motivo no se escatimó esfuerzos en su preparación para que en este día, una vez mas, celebráramos tantos años de vida entregada. Muchas familias se hicieron presentes, tanto de los alumnos como del personal educativo, sin dejar de mencionar la presencia de las hermanas de la comunidad del colegio, junto a las hermanas que se encontraban de visita y conforman el consejo regional Argentina-Bolivia y de la hermana Carmelita, consejera general, las cuales en nombre de toda la región y el instituto de las Hermanas Misioneras de la Consolata quisieron ser participes del evento.

Y qué mejor que dar inicio a esta hermosa fiesta con la celebración eucarística, presidida por el padre Carlos Mondini, misionero de la Consolata. Nuevamente el Señor presidía este encuentro familiar para que desde él y con el compartir entre todos fuera un verdadero donarse y ofrecer no solo a él sino también al prójimo y por ese motivo en el momento del ofertorio se invitó a los presentes a que dejaran los alimentos que habían traído cercano al altar como símbolo del verdadero deseo de donar como familia algo que era nuestro para que sea de todos, de manera que en el momento posterior a la comunión se diera paso a la cena compartiendo entre todos los alimentos que cada uno había ofrecido. Así se dio paso a la cena, la cual estuvo cargada de alegría, fraternidad, diversión sin dejar de mencionar los diferentes actos que ofrecieron los talleres extra áulicos que se realizan en el colegio: el de folcklore: quien presentó diferentes danzas folklóricas del país; el de teatro: conformado por alumnas del nivel secundario, presentaron un fragmento de la obra que están realizando basada en la figura del beato padre José Allamano; el de coro: integrado por alumnos del nivel primario presentaron tres canciones las cuales fueron preparadas y ensayadas con esmero y dedicación. Todo esto no hizo mas que permitir que esta fiesta-cena pudiera disfrutarse en un espíritu de familia.

· UN MURAL DE MANOS UNIDAS: Otra actividad que se llevó a cabo por conmemoración de los 60 años ha sido la realización de un mural. El objetivo de dicha actividad fue la de querer plasmar de algún modo lo que significan todos estos años de camino recorrido para nuestra comunidad. Es así como aparecen las figuras del beato padre José Allamano junto a la beata hermana Irene Stefani, acompañando el camino de tantos años de servicio, entrega y enseñanza a niños y jóvenes y que inicia en la parroquia Nuestra Señora de la Consolata que albergó los primeros niños del querido jardín de infantes allá por 1956. Como figura central observamos el árbol de la vida en cuyo corazón se encuentra nuestra querida Madre Consolata, ella que con su amor maternal no ha dejado de cuidar a la comunidad. En sus ramas hay muchas manitos que hacen el follaje y que también se encuentran a los costados del mural, manos que simbolizan el trabajo en unidad de todos los que han pasado y pasan por el colegio y por medio de las cuales hoy podemos celebrar la vida. Tampoco puede faltar nuestra querida protectora Santa Teresita – acompañada del logo elegido para simbolizar estos festejos – quien observa cariñosamente las figuras de los niños y jóvenes que mantienen en alto un cartel con la frase “Educando con amor” como así también la imagen del colegio.

Hna Marta Elena al trabajo

En definitiva el mural representa el espíritu de unidad, esfuerzo, entrega, familia y trabajo en equipo, valores que conforman las bases del colegio. Porque fue así como esta iniciativa se pudo llevar adelante, con la ayuda de todos los que formamos parte del colegio. Poco a poco fue tomando forma con la ayuda de todas las cerámicas en desuso que los alumnos fueron trayendo de sus casas – el mural se realizó con la técnica del mosaiquismo –, el tiempo ofrecido por los diferentes alumnos del nivel secundario que ayudaban a cortar y pegar los pedacitos de cerámicas, cada una de las manos realizadas por los alumnos del nivel primario y por todos aquellos que colaboraron quien con una cerámica, quien pegando, pintando, recortando, armando etc, de manera que el tan ansiado proyecto alcanzara su forma definitiva.