ABConsolata

Misioneras de la Consolata en Argentina y Bolivia
¡BIENVENID@S!

Beata Irene en los recuerdos de sus hijos

Al empezar la novena de la Beata Irene, dejémonos calentar el corazón por el testimonio y recuerdo vivo de la gente de Ghekondi, que ella mucho amó y que, por su parte, mucho aman a su hermana/madre.



"Nosotros la recordamos bien, y toda la gente también la recuerda todavía. Su trabajo consistía en cuidar y asistir a los enfermos".

"Si había algún enfermo, la hermana Irene iba inmediatamente a verlo, y de ella, todos aceptaban ser bautizados". Para un misionero, junto a la promoción humana y al servicio de la caridad, no puede faltar al deber de la evangelización.

"Si se trataba de un enfermo, ella no hacia distinción si era de día o de noche". Su compromiso era total, ella había puesto su vida a disposición por y para ellos.

"Nadie podía resistirse a su elocuencia". Veremos más tarde que la hermana Irene no había hecho estudios trascendentales, pero ninguna palabra es más eficaz que el ejemplo.



"Los domingos reunía a los cristianos y les hablaba, entreteniéndose con ellos." Era un modo eficaz de santificar el día del Señor.

"Todos los que se convirtieron aprendiendo el catecismo de ella, se mantuvieron fieles, especialmente las mujeres, incluso durante el período de la emergencia de los Mau Mau". Esta nota es extremadamente significativa, porque en los años 1952 a 1955, mientras arreciaba el movimiento nacionalista, liderado por Jomo Kenyatta (que más tarde se convirtió en el primer presidente del Kenia), todo lo que viniera del extranjero, incluyendo a los misioneros, fue arrasado y sus enseñanzas, fuertemente combatidas.

"Si ella estaba almorzando y alguno la llamaba, salía inmediatamente". Siempre disponible, siempre lista para acudir al encuentro de las necesidades de la gente.



"Andando a las aldeas, poblados, caminaba rezando con el rosario en la mano."Es típico de los santos ser contemplativos en la acción y la oración es el sostén de cualquier empresa, incluso de las más arduas.

"Sabía que podía contagiarse de la peste, pero ella se acercaba y tocaba a los enfermos, con tal de ayudarlos." En cosas así no hay necesidad de comentarios.

“Ha muerto por el trabajo de Dios... Estamos convencidos de que ella no está muerta, sino que descansa de sus fatigas."

"No puede estar en otro lugar más que en el paraíso."


"Todo en ella era bello, desde el rostro hasta los modales, y el corazón", dijeron en coro, agregando que nunca habían oído decir que alguien "tuviese algo contra ella... Pasó haciendo el bien a todos indistintamente y amando a todos con el mismo amor". 


Beata Irene en los recuerdos de sus hijos Beata Irene en los recuerdos de sus hijos Reviewed by abconsolata on 1:00 Rating: 5

No hay comentarios:

Con la tecnología de Blogger.