El Santa Teresita revitaliza su corazón y su amistad

Desde la biología, sabemos que hay vida en la persona porque late en su interior el corazón. Ese órgano que se encarga de que cada uno de los miembros, músculos, células, etc del cuerpo funcionen plenamente. Lo mismo sucede en el colegio Santa Teresita, podemos asegurar que hay vida en él porque en su interior late un corazón que sobrepasa tiempo y espacio. Un corazón que se dona a la humanidad a tiempo completo simplemente por AMOR. Un corazón que nos asegura que no estamos solos y que cada acción que realicemos la hacemos desde él y con él, y que nos invita día a día a testimoniar su amor y su entrega en lo cotidiano, en las pequeñas y simples cosas como una sonrisa, una palabra de aliento, un abrazo, un buenos días etc. Ese corazón tiene un nombre… seguramente lo adivinaron porque él no es exclusivo, también ustedes lo tienen, ese corazón es JESÚS. Y así como el corazón de la persona es contenido en el cuerpo dentro de la caja torácica, en la escuela, es contenido con mucho cariño en un lugar muy especial: La Capilla.

Camila y Jes´su Eucarístico

Desde los orígenes de colegio, y de la mano de nuestras queridas Hermanas Misioneras de a Consolata el Señor como un amigo fiel y amoroso ha ido acompañando también en la intimidad y el recogimiento de la capilla, el crecimiento de la comunidad que año a año iba creciendo más y más a la par de sus alumnos.

La capilla estuvo ubicada en diferentes sectores y con las últimas reformas de la institución, se le dio un nuevo lugar con el objetivo de que este nuevo espacio sea propicio para que todos los que conforman la comunidad educativa puedan acercarse y estar un momento en compañía de un amigo.

“Jesús está en el Santísimo Sacramento como amigo, por lo tanto tratémoslo como tal. Él nos quiere mucho y nosotros lo queremos mucho a Él. Comprendan bien este misterio de amor para nosotros: cada vez que vamos a visitarlo, como amigo nos acoge con afecto, es más, con un encendido deseo. Respondamos a tanta bondad yendo con gusto, aún por breves instantes, permaneciendo en su presencia con fe y amor, sintiéndonos felices por esa felicidad” (Beato Padre José Allamano).

el equipo de Pastoral

Estas palabras del Beato Padre José Allamano, son las que mejor reflejan lo que la comunidad educativa vivió a mediados de abril… ¡finalmente y después de una ansiada espera, que se prolongó por algunos meses, tuvimos la dicha de reinaugurar nuestra capilla! Tal vez cuando lean esto se preguntarán ¿por qué tanto alboroto? Y no es para menos, porque esto significaba una vez más contar con el espacio privilegiado en donde cada una de las personas que integran la comunidad puede acercarse y estar a los pies de tan querido amigo a ejemplo de María, para confiarle nuestra vida, nuestros, proyectos y sueños, lo que nos pone mal o nos llena de tristeza. Y es tanta esta alegría que no queríamos dejar pasar la oportunidad de compartirla con ustedes.

Tanto los niños, los jóvenes, docentes y personal no docente que conforman esta familia educativa allamaniana puede decir una vez más, nuestro corazón late fuertemente y no podemos ni queremos detenerlo. La vida sigue creciendo paso a paso entre juegos, estudios, actos, pizarras y tizas…

Carina y Camila

(Coordinadoras de Pastoral)