Una Novena de la Consolata muy especial

Para la comunidad de Vilacaya (Bolivia) la novena de la Virgen Consolata ha sido muy especial en este año 2016. Muchos “ingredientes” han dado un toque único: primero, la presencia de la Hna Remija, de la comunidad de Isla de Cañas, en visita a Vilacaya con las dos jóvenes en formación: Nadia y Muriel. También por la primera vez las hermanas han involucrado las Instituciones del pueblo en la novena, así que la Virgen se ha puesto en marcha, visitando el Centro de Salud, luego el Colegio, encontrando así muchas personas y brindando su consuelo. De verdad la Consolata no ha quedado sin hacer nada: ha concedido gracias importantes, y muchas otras la gente le ha presentado, confiando en su materna bondad.

la Consolata recibida por la Licenciada Ofelia, del Centro de Salud

Domingo 12 de junio, segundo día de la novena, durante la Misa las hermanas presentan la Virgen Consolata, puesta a los pies del altar, con un espléndido aguayo. A la noche, la Virgen es recibida por el Centro de Salud: aí se reza por el delicado trabajo del cuidar la vida y por todos los enfermos del cantón.

Lunes, 13 de junio la Consolata pasa al Colegio Landini, recibida por el curso de promoción, el Director del Colegio, la banda y todos los profesores y los estudiantes de la Unidad Educativa. En el salón se canta y se reza, luego se comparte el desayuno escolar. La Virgen es después trasladada a la dirección, puesta en un lindo altar. En la Misa con los estudiantes, cada chico/a es invitado a escribir su pedido en un papel, y ponerlo a los pies de Mamá Consolata.

todo el Colegio Landini recibe a la Virgen Consolata

Era la primera vez que la comunidad de las Hermanas proponía la novena de la Consolata al pueblo de Vilacaya, en vista también de la Profesión Perpetua de la Hna Stefania, el día de la fiesta, el 20 de junio. En esta semana de preparación, también hubo la primera visita a una comunidad que nunca habíamos visitado: Suquicha. Aí dejamos una imagen de la Virgen del Consuelo, confiando a ella nuestro camino con la gente de esta comunidad. ¡La Madre sabe abrir caminos!